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jueves, 29 de noviembre de 2007

Un interminable manía de sentirme desdichada!

Rabia. Y luego el repugnante olor de la orina caliente.

Un rojo pálido en sus mejillas y los años que le pesaban como bultos mayoristas del sucio barrio del Once.

Cruzó la calle como si nadie la observara; el líquido derramado, la incontinencia de años no la hacían sentir peor de lo que ya estaba.

En Uruguay esquina Paraguay venden esos horribles pañales para adultos;

No se inmutó, aún queda algo de dignidad cuando uno se mea encima.

sábado, 24 de noviembre de 2007

TATA DIOS !



Vi la muerte tres veces. La más contundente en un viejo alguacil que entró por mi ventana; Nunca hubiese imaginado que los insectos buscan también una compañía para morir.

Durante tres largos días apenas se movió; El hámster en su jaula lo miraba de reojo, quizá pensando en su cena, quizá apabullado por el olor a final que empezaba a crecer.

Roe la jaula y a mi me remuerde la conciencia ¿Qué come un alguacil? El hámster no va a salir; el alguacil no terminará sus días en estómago de un ratón.

Hoy me levante temprano y llovía, apenas sentí el aroma a lluvia entendí que ya no estaba.

sábado, 17 de noviembre de 2007

yo y más yo



No me importa lo que pensás.

De mí y sobre mí sólo yo puedo opinar.

Me creo y me descreo a cada minuto, versátil, colorida, hermosa.

Doliente, pujante, traicionera.

No me busques, no sabés donde encontrarme.

Las alas de mi mariposa se desvanecen ante tu red y escapan libres por el aire.

lunes, 5 de noviembre de 2007

Buen Viaje!!!


Mini foi se me metió en el corazón. Trajo consigo una bolsa de golosinas, un acolchado idéntico al mío pero con una mancha color café; algunos platos más pequeños de lo normal, tortas caseras, sorrentinos con nuez, chupetines en forma de patas.

Si tuviese que hablarles de mini foi diría que es una lucecita que iluminó la casa a falta de buenas ventanas con vista a un parque; se levanta temprano aunque se acuesta tarde; deja la ventana apenas abierta para que entre la luz y siempre que uno la llama ella ya está levantada.

Mini foi canta cuando limpia baño, eso quiere decir no muy a menudo. Cuando cocina corta las verduras tan pequeñas como sólo ella las comería; Todos los días le rechazo un plato distinto; mini foi no entiende como no me gustan las chauchas, por qué la zanahoria me gusta rallada así y así no, como es que hago para poner tanta sal en un sola comida, como hago para dar tantas vueltas y terminar por no comer nada.

A mini foi le debo una limonada, una fábrica de hacer stencil, un paseo por la plaza y probablemente algún helado; una salida al teatro, una noche de museos; le debo más y no pienso pagarlo. Pues así, es probable, que mini foi vuelva cada tanto a cobrar lo que alguna vez se le prometió.

domingo, 4 de noviembre de 2007